Declaración de fe.
La Palabra de Dios
Da testimonio de sí misma y es: Inerrante, infalible, revelación especial de Dios; está contenida en los 66 libros de la Biblia; siendo verbalmente inspirada por el Espíritu de Dios por medio de hombres de distintas épocas, lugares, nivel de educación y estatus social, sin eliminar su personalidad, sino siendo supervisada por Él. Cada hombre y mujer es llamado a someterse con toda su mente, alma y corazón a la Escritura como la voz autoritativa del Dios único y verdadero.
1.
Dios
Existe un solo Dios, quien es el Hacedor, preservador y soberano del universo, teniendo en sí mismo toda perfección, siendo infinito y a quien todas las criaturas le deben la máxima reverencia, amor y obediencia.
2.
La Trinidad
Dios se nos ha revelado como Padre, Hijo y Espíritu Santo, cada persona de la Divinidad con los mismos atributos de naturaleza, esencia y ser.
3.
Jesucristo
Es verdadero Dios y verdadero hombre. Encarnó en un cuerpo humano real, vivió una vida sin pecado, murió realmente para expiar de una vez y para siempre los pecados de los suyos en la cruz, resucitó en el mismo cuerpo para no morir más, y ascendió al cielo y está sentado a la diestra del Padre ejerciendo un dominio total y soberano sobre esta creación. Volverá al final de los tiempos a juzgar a los vivos y los muertos.
4.
Credos y confesiones
Aunque no estamos afiliados a ninguna denominación en específica, reconocemos y aceptamos El Credo de los Apóstoles, La Confesión de fe de Westminster, la Confesión Bautista de Fe de Londres de 1689, La Confesión Belga, el Catecismo de Heidelberg con una disposición de conformarse a la Palabra de Dios en todas las áreas de la vida. No obstante, dichos documentos históricos son herramientas muy útiles, siempre sujetas a la autoridad suprema de la Biblia.